Habrán oído hablar del síndrome de la hoja en blanco...terror de todo escritor en algún momento de su vida.
Hace mucho que lo oigo y jamás pude comprobar el pánico que puede llegar a sufrirse al enfrentarse a ese vacío...Y eso me austa!! ¿Porqué no soy capaz?
Hoy lo he decidido!!...lo he estado pensando... y lo estoy intentando...no tengo nada importante que decir...me voy a callaaaar....(silencio)...(me aguanto)...pero...(no...me tengo que aguantar)...poco me ha durado, pues mis dedos se deslizan como un niño por el tobogán. Y si mi mente no se para a pensar en que lo que escribo no tiene mucha importancia, todo ocurre rápidamente.
Hoy quería hablar de mi mente...y no tengo que hacer esfuerzos porque ella habla sola. Habla todo el tiempo...y no dice nada. Tiene siempre la necesidad de ocupar los espacios en blanco, los silencios...y siempre habla rápido (La prisa es la herramienta de los que huyen, eso creo yo). Parece que tiene miedo a que la descubran callada...como si en ese silencio se apreciara su debilidad...lucha y lucha por mantener un ritmo constante de cháchara consigo misma...una conversación airada con mi consciencia, una música pegadiza, imágenes recuperadas, ideas sin sentido cruzan fugaces el cielo de mi mente...pensamientos inconexos, juicios varios, sin argumentos ni finalidad...todo mezclado, todo emarullado...todo el tiempo.
Agotamiento...aburrimiento...sinsentido...búsqueda....escucha...
Si en ese momento, cuando consigues escuchar toda la fiesta que se ha montado en tu casa, sin tu permiso...empiezas a pensar que algo ha fallado y no recuerdas en qué momento perdiste la llave de tu puerta...estás empezando a recuperarla!!
Comenzaste a almacenar trastos inservibles porque creías que un dia los utilizarías, guardaste recuerdos que creías que un dia mirarías, aprendiste, leiste, memorizaste, copiaste, fingiste, rescataste todo lo que los demás no querían para hacerlo servir tu, ayudaste a lo demás a solucionar sus problemas sin solucionar tu los tuyos...te callaste lloros, suprimiste sonrrisas, no diste aquel paseo, ni fuiste a ver a aquela amiga... Y esta es la respuesta de tu mente: atasco!!
Flujo compulsivo de mierda neuronal.
Y yo me pregunto...esto ¿es pensar?.Creo que no.
El diccionario dice:
Pensar:Proceso psíquico racional, subjetivo e interno de conocer, comprender, juzgar y razonar los objetivos y hechos.
Entonces no habrá más remedio que sentarse y pensar...digo yo que ya va siendo hora.
Pero como es natural...ante tanto caos...lo único que no puedes hacer es acumular más información. Como decía un gran profesora de instituto : "antes de entrar, dejen salir".
Así que antes de sentarme a pensar, cada dia...lo que hago es dejar salir.
Una manera es esta.
Otra son mis emociones.
Y otra es mi silencio.
Cultivar el silencio, como un jardinero cultiva flores, es lo más interesante que he hecho nunca.
Es algo que reporta grandes beneficios...y la mente lo agradece como quien descarga con alivio el peso del mundo, acumulado a través de los años...y de los siglos.
Sentarse con uno mismo, sin nada que hacer ni pensar. Sin nada que mover ni probar. Sin nada que lograr ni perder. Sin nada...bueno si, con una sóla cosa: la cosciencia de que estar aquí y ahora.
Observarse...escucharse, sentirse, respirarse, pesarse, soltarse...oir, saborear, notar...sentir...Vivir!!
Obervar las nubes que hoy han aparecido en tu cielo...ver su color, su forma y su textura. Dejar que te acaricien al pasar por tu lado, sentir su frescor en la cara...Y como el artista, no juzgarlas...vivirlas con tu paleta de emociones...
No reaccionar ante ellas...no juzgar, no justificar...oir su melodía.
Y si una nube es demasiado bella y te conquista...o demasiado fuerte y te atrapa...déjate flotar...y con cariño y ternura dile: Hoy no estoy para ti...quizá mañana! Hoy estoy sólo para mi...